Antes de terminar la función ya
se conocen a los ganadores y empiezan una serie de enfrentamientos y
celebraciones, pero todo eso terminará cuando luego el resultado de cuál fue la
lista que dio el mejor espectáculo circense,
sobreviva a la “bajada de mesas” y diferentes tipos de artimañas para
que la lista que está inmediatamente después gane.
Terminada la temporada de circo
en la universidad, como todo mal espectáculo, organizado por gente de lo peor,
dejan horrible el lugar que ocuparon. Así tenemos alfombras de papeles, muros
totalmente empapelados, pintas, banderolas tiradas, cadenetas a medio colgar, y
una tamaña cantidad de desperdicios electorales que ni el mismo personal de
limpieza se da abasto para eliminar.
Si entras por la puerta cerca de
la plaza cívica de la facultad de Derecho, encontrarás unos hermosos containers
con papeles despegándose, muchos rotos, y una serie de cadenas que cada vez van
cayendo poco a poco.
Si entras por la puerta nro. 3 cerca
de la facultad de letras, bueno éste es el escenario central, serás recibido
por cadenetas y una alfombra de afiches que ya han empezado a despegarse, y si
tienes la mala suerte de que ha llovido o está lloviendo, mejor camina por la
pista o si no darás un espectáculo muy gracioso cayéndote o mejor aún, intentando
no caer. Ahí me verás riéndome de ti, solía pararme cerca de la rotonda para
cuando llovía ver como la gente patinaba, resbalaba, hacían una serie de
maniobras interesantes y graciosas pero en fin caían.
Luego te cruzarás con más papeles
en tu facultad, si es que no gano la lista tal, inmediatamente sacará un
volante, indicando la cantidad de votos y qué mesas eliminaron y que si no lo
hubiesen hecho ellos hubiesen ganado y que te apiades y que los apoyes y… y… y…,
váyanse a la mi…sa a pedir perdón por sus pecados y a llorar a otra parte.
Lo curioso es que no solo
desaparece o es desechada toda la basura, todos los residuos propagandísticos,
sino que también personas: estudiantes y graduados, desaparecen, se esfuman, a
algunos los desechan, sin importar lo que hayan prometido. Incluso hay grupos
que nunca más vuelves a ver, sin embargo sus “fundadores” –jajaja- andan por allí,
tratando de pegarse como rémoras al grupo que ganó. Que no te sorprenda si
encuentras a tu compañero por ahí en un tacho o abandonado, arrepentido… “tenías
razón, eran así y peores todavía, oye yo no creía…” –te dicen.
Dejemos tranquilos a los contendientes de estos
faenones, dejémoslos continuar destruyendo nuestra facultad, dejémoslos
beneficiarse de nuestra indiferencia para que sigan robando, digo “trabajando” para
su conveniencia, para sus bolsillos –perdón, para el bienestar de la
universidad, sigamos permitiendo que hagan de las suyas, pillos, malandrines,
mentirosos, convenidos, ya les llegará.
Raphael Nicolás Catalán Córdova
Eso de los papeles ya es de lo peor... dicen que se preocupan por su universidad, facultad, y lo primero que hacen es darle un aspecto de basural, contribuir con la contaminación y hasta con la deforestación (¿saben cuántos árboles mueren por cada hoja impresa?), pero supongo que "todo cuenta" para ganar. Lo peor que esto es un círculo vicioso, porque este mismo ambiente se repite año tras año (lo digo yo que ya llevo 4 años viendo lo mismo), y al parecer seguirá siendo así por los siglos de los siglos.
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